domingo, 22 de marzo de 2015

HUBO UN TIRMPO... ¿RECUERDAS?



 
 
Hubo un tiempo... ¿recuerdas? su memoria
Vivirá en nuestro pecho eternamente...
Ambos sentimos un cariño ardiente;
El mismo, ¡oh virgen! que me arrastra a ti.

¡Ay! desde el día en que por vez primera
Eterno amor mi labio te ha jurado,
Y pesares mi vida han desgarrado,
Pesares que no puedes tú sufrir;

Desde entonces el triste pensamiento
De tu olvido falaz en mi agonía:
Olvido de un amor todo armonía,
Fugitivo en su yerto corazón.

Y sin embargo, celestial consuelo
Llega a inundar mi espíritu agobiado,
Hoy que tu dulce voz ha despertado
Recuerdos, ¡ay! de un tiempo que pasó.

Aunque jamás tu corazón de hielo
Palpite en mi presencia estremecido,
Me es grato recordar que no has podido
Nunca olvidar nuestro primer amor.

Y si pretendes con tenaz empeño
Seguir indiferente tu camino...
Obedece la voz de tu destino
Que odiarme puedes; olvidarme, no.

sábado, 21 de marzo de 2015

EL SONETO ES TAN ÁGIL COMO UN BRICO...






El soneto es tan ágil como un brinco,
nadadora de noches perfumadas;
aquí, tu voz, tu risa, tus miradas,
esta rama de amor tejen espesa.

Desde el pálido gris a la frambuesa,
del cálido tabaco hojas doradas,
todas tus sombras rinden concentradas
aguas de una corriente que no cesa.

Oh lento surtidor que sombras mana,
tranquilas formas de figura humana,
en líquidos topacios ya resuelto.

Esta tu oscura piel de alga morena
cambia la espesa rama en fuerte vena,
y en yodo creces: surtidor esbelto.

jueves, 19 de marzo de 2015

OFRENDA A LA TORMENTA. Dolores Redondo.



En el plazo de apenas dos años, Dolores Redondo se ha convertido en un referente de la novela negra contemporánea, tanto dentro como fuera de nuestras fronteras.
¿Qué es la Trilogía del Baztán? La combinación  perfecta en elementos de intriga, suspense, novela negra, mitología y el lado más íntimo de las relaciones humanas.
Si tuviera que definir la “Ofrenda a la tormenta” con una palabra sería: autenticidad y madurez.

SINOPSIS: El esperadísimo final de la Trilogía del Baztán, un éxito que ya ha cautivado a mas de 200.000 lectores. Nunca lo habrías imaginado. Una mujer denuncia que la muerte súbita de su nieta, oficialmente una muerte de cuna, le parece sospechosa tras el comportamiento extraño del padre de la niña, que ha sido detenido cuando intentaba robar el cadáver pronunciando palabras inconexas acerca de entregar a su propia hija. El bebé tiene unas marcas rojizas en el rostro que indican que ha habido presión y parece claro que ha sido asesinada. La abuela de la pequeña habla de una criatura mágica de la zona, un ser maléfico, causante de las pesadillas que producen en el durmiente una inmovilización que les impide despertar. Se trata del Inguma, el ser que arrebata la vida durante el sueño. La investigación de este caso llevará a Amaia y a su equipo a descubrir algunas irregularidades en casos parecidos que se produjeron en el valle en el pasado, demasiados casos en una zona relativamente pequeña. Y entonces, trasladado por orden del juez Marquina, el asesino Berasategui aparece muerto en su celda, tras un coma inducido por una droga que alguien ha tenido que facilitarle. Trepidante y estremecedora, la trama se acelera hacia una resolución sorprendente, en la que Amaia debe enfrentarse al autentico origen de los sucesos que han asolado el valle del Baztán. Y mientras una impresionante tormenta de nieve parece querer sepultar una verdad demoledora.

Dolores Redondo vuelve a ofrecernos unas magníficas descripciones ambientales para situarnos en los lugares que nos describe y recrea de forma magistral la atmósfera asfixiante y opresiva que rodea toda la investigación; que se desarrolla con tensión y buen ritmo a medida que vas adentrándote en la historia. De nuevo aprovecha no solo los elementos naturales, sino también los sobrenaturales del folclore más popular arraigado en el norte de España. Como en los anteriores libros le dan cierta originalidad. El libro reflexiona sobre el Mal con mayúsculas y aún más sobre la locura y sobre los límites que la separan de la realidad o el mito.

El estilo de la novela es muy sencillo, carente de todo artificio, más preciso y certero. El ritmo es más lento en la primera parte de la novela, cogiendo velocidad a medida que avanza la trama; y hará que poco a poco, hayan encajado como un puzzle perfecto las tramas que se desarrollan.
Los diálogos continúan siendo naturales y muy fluidos. Las situaciones de intriga se suceden unas a otras de tal manera que cada capítulo pone ante nuestra imaginación un nuevo hecho sorprendente. Página a página, se va tejiendo una red que, al mismo tiempo que nos encamina hacia el desenlace final, nos descubre los vínculos existentes entre los crímenes que se describen en ésta  y los narrados en las anteriores novelas de “El guardián invisible” y “Legado en los huesos”, formando un todo, una historia única.

Los personajes están caracterizados a la perfección y no son personajes planos sino que tienen mil aristas y recovecos que hacen que nunca podamos prever del todo sus reacciones. Con vaivenes emocionales. Bien construidos que mantienen la esencia del primer libro pero con una clara evolución,  perfilándolos y definiéndolos.
La parte personal cobra si cabe más trascendencia que en las dos novelas anteriores.

Es un libro adictivo, con un ritmo perfectamente diseñado, que sabe mantener la intriga pese a que desde la mitad, más o menos, del volumen, ya te imaginas quien es el culpable. Se palpa que Dolores se implica en cada novela y desmenuza la historia real, los acontecimientos, las leyendas y mitología para ofrecer al lector un entramado magníficamente hilado con el que te mantiene pegada a las páginas casi sin darte cuenta.
La novela es aún más madura e intensa que las anteriores, y la segunda lo fue con creces, consigue poner un gran broche a una serie que, no es que haya ido de menos a más, sino que ha conseguido que el interés de los lectores haya ido creciendo con cada novela publicada. El lector descubrirá finalmente el germen de la trilogía, el porqué de todo lo ocurrido.
Ofrenda a la tormenta es un broche de oro a una trilogía magnífica.