sábado, 31 de agosto de 2019

LLAMA.




Como en la mano, blanca, una cerilla,
antes de dar la llama, a todas partes
extiende lenguas bruscas; así empieza
en el corro cercano, clara, cálida y rápida,
a abrirse, convulsiva, en redondo su danza.
Y de repente es llama, enteramente.
Ella inflama su pelo a una mirada,
y de pronto, con arte osado, gira
todo su traje en ese celo ardiente
del que , como serpientes que dan terror, los brazos
desnudos se levantan, en vela y chasqueantes.
Luego, como si el fuego se le volviera escaso,
lo reúne y lo arroja todo entero
espléndida, con un gesto orgulloso,
y lo mira: rabioso yace en tierra,
y aún sigue llameando y no se entrega.
Pero triunfal, segura y con sonrisa
suave de saludo, alza la cara,
y lo apaga, pisándolo con pequeños pies firmes.

DÍAS Y NOCHES TE HE BUSCADO.


 

Días y noches te he buscado
Sin encontrar el sitio en donde cantas
Te he buscado por el tiempo arriba y por el río abajo
Te has perdido entre las lágrimas

Noches y noches te he buscado
Sin encontrar el sitio en donde lloras
Porque yo sé que estás llorando
Me basta con mirarme en un espejo
Para saber que estás llorando y me has llorado

Sólo tú salvas el llanto
Y de mendigo oscuro
Lo haces rey coronado por tu mano

viernes, 30 de agosto de 2019

EL CIGARRO.


 

Lío tabaco en un papel; agarro
lumbre y lo enciendo, arde ya medida
que arde, muere; muere y enseguida
tiro la punta, bárrenla... Y al carro!

Un alma envuelve Dios en frágil barro,
y la enciende en la lumbre de la vida,
chupa el tiempo y resulta en la partida
un cadáver. El hombre es un cigarro.

La ceniza que cae es su ventura;
el humo que se eleva su esperanza;
lo que arderá después su loco anhelo.

Cigarro tras cigarro el tiempo apura;
colilla tras colilla al hoyo lanza,
pero el aroma... ¡Piérdase en el cielo!

jueves, 29 de agosto de 2019

LOS SEÑORES DEL TIEMPO. Eva García Sáenz de Urturi.


Quién me iba a decir cuando comencé a leer “El silencio de la ciudad blanca” y “Los ritos del agua” que ese iba a ser el origen de una trilogía, y que sería de las buenas. Y además, estar deseando leer el siguiente libro tras haber devorado las dos anteriores.

SINOPSIS: Vitoria, 2019. Los señores del tiempo, una épica novela histórica ambientada en el medievo, se publica con gran éxito bajo un misterioso pseudónimo: Diego Veilaz.
Victoria, 1192. Diago Vela, el legendario conde don Vela, retorna a su villa después de dos años en una peligrosa misión encomendada por el rey Sancho VI el Sabio de Navarra y encuentra a su hermano Nagorno desposado con la que era su prometida, la noble e intrigante Onneca de Maestu.
Unai López de Ayala, Kraken, se enfrenta a unas desconcertantes muertes que siguen un modus operandi medieval. Son idénticas a los asesinatos descritos en la novela Los señores del tiempo: un envenenamiento con la «mosca española» ―la Viagra medieval―, unas víctimas emparedadas como se hacía antaño en el «voto de tinieblas» y un «encubamiento», que consistía en lanzar al río a un preso encerrado en un tonel junto con un gallo, un perro, un gato y una víbora.
Las investigaciones llevarán a Kraken hasta el señor de la torre de Nograro, una casa-torre fortificada habitada ininterrumpidamente desde hace mil años por el primogénito varón. Pero el reverso de tanta nobleza es la tendencia de los señores de la torre a padecer el trastorno de identidad múltiple, un detalle que arrastrará a Estíbaliz a vivir una arriesgada historia de amor.


Tras el indiscutible éxito de las dos primeras entregas de la trilogía de la ciudad blanca, Eva García Sáenz de Urturi, vuelve a convencer al lector con “Los señores del tiempo”. Una apasionante novela de crímenes y misterios muy bien construida en torno a una trama compleja como atractiva junto con unos protagonistas con personalidad propia repletos de matices.
La novela comienza con toda la ciudad alterada por la publicación de “Los señores del tiempo” una novela ambienta en la propia Vitoria medieval. Con respecto, a esta última entrega, la escritora os dará un dos por uno, ya que entre estas páginas vais a encontrar dos novelas históricas que tiene lugar en el medievo, con el mismo título que da nombre a la novela; y la otra, un thriller en la que se relata la investigación que Unai y su equipo realizaran para esclarecer los hechos que suceden en la actualidad. Una carrera contrareloj para detener las muertes que suceden con modus operandi medieval idénticos a las descritas en la novela que da argumento al libro.
Dos tramas que, cada una a su manera, os mantendrán pegados a sus páginas y que la autora os ira ofreciendo de manera alterna mediante capítulos que le dan ritmo y agilidad, relacionado ambas tramas y logrando que en ningún momento la atención del lector decaiga y esperando con ansia retomar la continuación de lo que habéis dejado atrás.
Personalmente, me ha parecido especialmente acertado el nexo entre la historia del pasado y la del presente, es decir, los crímenes perpetrados al estilo medieval en nuestros días, y el motivo de ellos. “Los señores del tiempo” se convierte en una mezcla de novela histórica de intriga y novela negra contemporánea, bien diferenciadas, pero que no podían existir la una sin la otra.
Os encontrareis con una historia meditada, estudiada y armada con tiempo e ingenio sin prisas. Hecho que queda bien reflejado en la forma de escribir ágil y segura que Eva llega a alcanzar en esta novela. Una astuta e interesante forma de captar a dos tipos de lectores completamente diferentes.
Intriga, tensión, historia y emoción ponen la guinda más sabrosa a este fin de fiesta.

Una novela histórica envenada firmada con seudónimo, un esquivo escritor de éxito, un noble de personalidad compleja y una nueva serie de crueles asesinatos inspirados en un libro que todo el mundo habla.
Una vez más, Eva García Sáenz os enganchara con su mezcla de novela policiaca e histórica a la que os tiene acostumbrados. Si algo tiene esta novela es que existe una alternativa claramente diferenciada de los capítulos del presente con Unai y la investigación policial de los asesinatos en primer plano y el pasado en el que descubriremos la novela de Los señores del tiempo en la que se centran los casos.
El lector se introducirá en la historia desde el primer capítulo, ya que no son necesarias las presentaciones de personajes y sus propias historias. A partir de ese momento empieza una vorágine de investigación policial en la que se suceden las entrevistas, los descubrimientos o las pruebas que conseguirán que os enganchéis a la lectura de manera que no deseareis para de leer. Sin embargo, las partes que se corresponden con la novela histórica, personalmente, me ha parecido más flojas poco profundas en el contenido en cuanto a la intriga, si bien es cierto que la simultaneidad de ambas conforman una estupenda trama. Es una opinión personal.
El encaje de la narración, al igual que en las dos primeras novelas, los escenarios tienen un papel importante, Vitoria y sus alrededores tienen una gran importancia en la trama.
“Los señores del tiempo” es una novela bien estructurada, bien hilada, con un ritmo ágil y con personajes bien perfilados, que os sumergen de lleno en el argumento. Con una narración fluida y una trama potente, Eva construye una historia llena de sorpresas, y con un desenlace que sorprende tanto por la resolución del caso como por la decisión de Unai y el secreto de su familia.
Ya sabemos que la autora tiene predilección por la temática histórica, la ambientación es buenísima, para realizar las descripciones del S. XII, sin dejarse ningún detalle, tanto de la manera de hablar en aquel siglo, como los lugares y los escenarios, algo que es de admirar ya que enriquece culturalmente.

También como en las anteriores, el gran personaje será la ciudad blanca, sus monumentos y sus alrededores.
Volveréis a encontraros con personajes que salían en libros anteriores, y alguno que otro, os dejarán momentos de mucha tensión, creando tramas adicionales, que no están de más, y que os ofrecerán perspectivas muy diferentes. Todos ellos realmente interesantes, que os engañan, que os impresionan y que os hace pensar mucho.
También es reseñable la profundidad de los personajes, personajes carismáticos; los nuevos poseen una marcada personalidad –mención especial para Alvar, señor de Nograro, que son parte fundamental del relato- y los ya conocidos incrementan su realismo con una creíble evolución. Unai sufre el mayor cambio; debido a los hechos que se suceden a su alrededor replanteándose su trayectoria profesional.
“Los señores del tiempo” tiene más tono emocional y gana fuerza la historia de Kraken,  de su familia y sus relaciones, sobre todo en lo concerniente a la vida sentimental de su compañera Esti.

En conclusión, nos vamos a encontrar una trama compleja y muy bien urdida a través de dos hilos argumentales que tienen lugar en épocas diferentes, que la escritora vitoriana relaciona con maestría, dejando atados y bien atados todos los cabos, por difícil que nos pudiera parece en algunos momentos. Con “Los señores del tiempo” pone el broche de oro a la trilogía de la ciudad blanca.