viernes, 19 de abril de 2013

A QUE SABE LA LUNA. Cuento Michael Grejniec.




A todos alguna vez nos apeteció alcanzar la luna ¿verdad? Pues de esto nos habla este libro, de la luna, personaje mágico que es objeto de interés para los personajes de este libro, tanto que deciden un día reunirse para ver el modo de llegar hasta ella y probar a qué sabe. Bonita historia sobre la amistad y la necesidad del trabajo en equipo para conseguir objetivos.




Hacía mucho tiempo que los animales deseaban averiguar a qué sabía la luna. Pero por mucho que lo intentaban, ningún animal era capaz de alcanzarla para comprobarlo.
Así que un día la tortuga decide subir a la montaña más alta para remediarlo. En la cima de la montaña, efectivamente la luna está mucho más cerca, pero todavía queda un poquito para poder tocarla. Así que llama al elefante, que se sube encima de la tortuga para ver si así llegan. La luna se lo toma como un juego y decide alejarse un poquito. Y así, el elefante tampoco llega. Así que van llamando a los demás animales hasta formar una improbable torre con la tortuga en la base, seguida del elefante, la jirafa, la cebra,  el león, el zorro, el mono… y cada vez que la luna ve llegar a otro animal, se aleja un poquito más para evitar que logren su objetivo. Hasta que por último, el mono, que “ya puede oler la luna”, llama al ratón.
Cuando la luna ve al ratón, piensa que no le hace falta distanciarse, ni siquiera un poquito, tratándose de un animal tan pequeño. Y el ratón escala la torre de animales y ¡por fin! consigue arrancar un trozo pequeño de luna. Luego le va pasando un trozo a cada uno de los demás animales. ¿Y a qué sabe? Pues a lo que a cada uno le gusta más. Después de su formidable hazaña, los animales se acurrucan todos juntos y se duermen.


 
"De este modo van llegando a la montaña más alta: la tortuga, el elefante, la jirafa, la cebra, el león, el zorro, el mono y el ratón... Y es el último, el ratón, el que consigue ante el cansancio de la luna y la poca expectativa que pone está en él, no solo alcanzarla, sino saborearla y darle a probar al resto… ¡Ummmmmmm! ¿A qué le supo a cada uno…?   A lo que más les gustaba a ellos saborear…"







No hay comentarios:

Publicar un comentario