Edwin
y yo nos masturbábamos de ocho a nueve
en
clase de aritmética, y de cuatro a cinco
en
la de Historia Patria. El de él
era
idéntico a su cara: pícaro y sonriente,
con
el glande torcido, como su peinado.
Él
semiacostado en la última banca del salón
y
yo en la contigua. Con vaselina o crema dental.
Cuando
ocurría lo mejor
guardábamos
el semen en un libro. Con fecha.
"Para
cuando pasen los años
y
nos queramos acordar Gómez Jattin"
como
él decía.
Hola Desván, retales de palabras!! Soy Maria J. Mangones del blog Our Notebooks. Tengo el honor de decirte que fuiste nominada al Book Tag!! Que increíble no?!?
ResponderEliminarPásate por mi blog http://ournotebooks.blogspot.com.co/2016/11/book-tag-mj.html para que descubras de que trata.
Saludos y nos leemos luego!!