En
el soberbio trono diamantino
que
con sangrientas plantas huella Marte,
frenético,
el Manchego su estandarte
tremola
con esfuerzo peregrino.
Cuelga
las armas y el acero fino
con
que destroza, asuela, raja y parte:
¡nuevas
proezas!, pero inventa el arte
un
nuevo estilo al nuevo paladino.
Y
si de su Amadís se precia Gaula,
por
cuyos bravos descendientes Grecia
triunfó
mil veces y su fama ensancha,
hoy
a Quijote le corona el aula
do
Belona preside, y de él se precia,
más
que Grecia ni Gaula, la alta Mancha.
Nunca
sus glorias el olvido mancha,
pues
hasta Rocinante, en ser gallardo,
excede
a Brilladoro y a Bayardo.
Bueno, no soy mucho de poesia, pero si que me gustan algunas, la ilustración es una pasada.
ResponderEliminarMª Carmen, a mi también me gusta mucho la ilustración.
EliminarSaludos