martes, 16 de agosto de 2016

EL SAMURÁI DE SEVILLA. John J. Healey.



Con la publicación por parte de la editorial Esfera de “El samurái de Sevilla” de John J. Healy, nos encontramos ante una historia fascinante pero real. Cabe imaginar que el lector occidental que se acerque a esta novela tendrá un cierto interés por la cultura japonesa como le ocurre al autor. Y sobre todo una actitud aventurera.


SINOPSIS: Año 1614, en el puerto de Sanlúcar de Barrameda atraca un barco con unos exóticos pasajeros: una embajada de veintidós samuráis que comenzaban en el puerto español su visita a Europa. Habían tardado casi un año en hacer el largo viaje desde el lejano y hermético Japón, y nada les había preparado para el tremendo choque cultural que les aguardaba.
El protagonista de esta novela ―en la que John J. Healey mezcla de forma magistral la realidad de aquel viaje con la ficción― es el samurái Shiro, quien logra trabar amistad con el duque de Medina Sidonia y llega a ganarse el apoyo del rey Felipe III y del duque de Lerma. Shiro, sabio y mesurado en cuestiones diplomáticas, sin embargo no conseguirá evitar enamorarse de una joven sevillana malcasada con un aristócrata de poco fiar. Esta apasionada relación le obligará a combatir no pocos peligros y los obstáculos impuestos por los prejuicios y las normas de la sociedad sevillana del Siglo XVII. 




Como en tantas otras novelas, una vez más, se mezcla en esta la fantasía literaria con los hechos históricos; consiguiendo, en su conjunto, una narración agradable de leer. En lo que toca al libro está lleno de matices: una mezcla de candor, odio y esperanza. También es una de las escasas crónicas de la historia española casi desconocida. “El samurái de Sevilla”, sin victimismos ni moralinas, traza la cartografía de toda una sociedad con su manera de pensar y su caracterización. Un fiel reflejo de una época dura y un acontecimiento desapercibido de nuestra historia.
Con el protagonista, vivimos en choque cultural entre nipones y españoles, su entrada en la realidad y la nobleza española y su incipiente relación con una aristócrata andaluza casada con un crápula.
 Al adentrarnos a través de sus páginas conoceremos como el samurái Shiro junto al resto de la expedición llegan a una España del Siglo XVII, en la que tendrán que ganarse el apoyo de personajes como el rey Felipe III y los duques de Lerma y Sidonia. Además de intentar caer bien en la corte, cosa no siempre fácil. Sobre todo, cuando hay amoríos de por medio que, llegados a la zona de la infidelidad, pueden adquirir visos de peligrosidad.
John Healy, quizás porque tiene la imaginación adiestrada en idas y venidas, en encuentros fértiles en  mundos lejanos entre sí, mezcla la documentación con el impulso para retratar la vida en un lado y en otro, las cosas vistas a través de una y otra mentalidad, la cultura guerrera pero sofisticada de Japón y la de la España barroca, oscurantista y pobretona de la limpieza de sangre.
De esta forma la historia, la aventura y el romance se dan la mano en una novela que se lee de forma compulsiva, mientras nos dejamos seducir por la prosa.

La singularidad de esta obra viene de la mano de un elemento exótico y tradicional. En consecuencia, la novela está bien trazada, templada como el carácter de su protagonista. No es una novela que sorprenda o innove con sus giros o sus personajes, más bien tiene un aire clásico, de esas historias que se degustan porque todos los elementos, siendo reconocibles, están bien puestos y desarrollados. Como un buen artesano con una prosa limpia y eficaz. Expone, narra, recrea con un sentido del ritmo propio para desplegar y  fraguar las atmosferas de aquellos tiempos. Por consiguiente, el autor ha sabido crear una historia redonda e interesante.
Por tanto, no esperéis una novela de acción. El tono es más el de una novela de viajes, con un cierto colorido “romántico”, jugando con el exotismo y la novedad del acontecimiento narrado.
Del mismo modo, no hace que la ambientación resulte floja. El autor sabe representar le época, la cultura japonesa e hispana con fuerza y visualidad. Atreviéndose con personajes históricos conocidos de nuestra historia.
Resulta destacable las diferencias y cercanías religiosas entre unos y otros que el autor muestra con claridad y ha sabido plasmar con acierto: los japoneses intentan erradicar el cristianismo en su país y Felipe III acaba de expulsar a los moriscos.
Healey mezcla realidad y ficción para ilustrar el choque cultural entre sevillanos y nipones. Y sabe transmitir al lector la percepción de aquellos aires de la Sevilla barroca.

Un conclave de personajes en un entramado de alianzas, intrigas y traiciones que determinaran el destino de todos los protagonistas.
Desfilaran por una corte en la que los intereses creados de unos y otros irán apareciendo y entrelazándose a lo largo de las páginas de “El samurái de Sevilla”. Con personajes, unos históricos y otros ficticios, que zascandilearan por la corte de Felipe III.
Un reparto que se extiende desde la realeza a la nobleza: El duque de Medina Sidonia, el duque de Lerma, Don Rodrigo, María Luisa o el marido de esta última el pérfido Julián. Pasando por: el padre Luis Sotelo y sus jesuitas, con ganas de cristianizar a los infieles de aquellas tierras lejanas y el marinero Williams Adams. Además de los exóticos señor de Sedai, Hasekura Tsunenago y el protagonista Shiro, Así como personajes históricos como Miguel de Cervantes y Galileo Galilei.
La aventura en constante evolución vivida por personajes tanto principales como secundarios. Héroes de lo cotidiano, con el mazo del pasado dando luz a una historia leída en el presente.

Tal vez el verano sea un buen momento para leer novelas históricas. Las vacaciones animan hacer excursiones a otros tiempos y, a falta de otra máquina más eficaz para los viajes a otras épocas, uno puede recurrir a las lecturas de intriga para periplos imaginarios a escenarios de vivaz colorido y atractivos personajes.
“El samurái de Sevilla” es una novela escrita con agilidad, con un exacto dominio de los tempos narrativos, además de apoyarse en un exquisito rigor documental. A la sobresaliente habilidad con la que John J: Healey aúna ficción y realidad, se une su solvencia para expresar de una manera precisa y creíble, ese choque cultural que hace, ya más de cinco siglos, produjo la llegada de aquel barco japonés a la península. Pues no cabe duda, de que la efusividad occidental, dista mucho –aún hoy-, de la mesura y la delicadeza oriental.
En suma, un relato de muy grata y entretenida lectura, donde el sentimiento y la reflexión se tornan, a su vez, enseñanza y apredizaje. 


1 comentario:

  1. Una novela interesante, sin duda alguna, sobre todo por ese choque de cultura que mencionas y por que trata un hecho histórico poco conocido, sin embargo, no soy muy de novelas históricas así que no llega a llamarme demasiado la atención. Me animaría más su fuera un ensayo o un libro de historia sobre el hecho. Un saludo.

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