jueves, 30 de noviembre de 2023

LAS GRANDES MUJERES. Alfonsina Storni.

 

“Las grandes mujeres”, una antología de la obra de la poeta argentina. Esta selección cuenta con unos pocos poemas de sus diversos libros y os ayudará a ver su evolución.
No llego a ti como un extraño, sino como alguien que anhela el dulce sonido de tus versos y la imagen de tus poemas. He disfrutado tanto de los poemas como de las ilustraciones de Antonia Santolaya que enriquecen unos textos bellísimos.
Su poesía es tierna y delicada, pero rocosa que te araña las manos. Escribía con una sensibilidad y a la vez con nervios quebradizos que te hace pensar tanto en la muerte como en la vida. Donde podréis reconocer a la persona, antes de sentirse profundamente defraudada por la existencia. No como una manera de escribir, sino como una manera de vivir.
Alfonsina Storni no se disfraza al hablar, presenta una cartografía de sus rimas que es leve brisa, es un dialogo sin fronteras, o la ligera lira de quien está aprendiendo a vivir.
Vivir a través de la poesía la tragedia y el gozo de existir y morir, todo ello tomado en sorbos.
Volveré a encontrarme con sus versos.

Vida.
Mis nervios están locos, en las venas
la sangre hierve, líquido de fuego
salta a mis labios donde finge luego
la alegría de todas las verbenas.

Tengo deseos de reír; las penas
que de donar a voluntad no alego,
hoy conmigo no juegan y yo juego
con la tristeza azul de que están llenas.

El mundo late; toda su armonía
la siento tan vibrante que hago mía
cuando escancio en su trova de hechicera.

Es que abrí la ventana hace un momento
y en las alas finísimas del viento
me ha traído su sol la primavera.

 

domingo, 26 de noviembre de 2023

¿CUANTO TIEMPO HACE YA QUE TE HAS IDO?



¿Cuánto tiempo hace ya que te has ido?
No lo recuerdo casi.
Los días bajan, unos tras otros, a acostarse en su
tumba desconocida sin que los sienta. Duermo.No te
engañes: si me has encontrado un día por las calles y
te he mirado, mis ojos iban ciegos y no veían.
Si te hallé en casa de amigos y hablamos, mi lengua
dijo palabras sin sentido.
Si me diste la mano o te la di, en un sitio cualquiera,
era los músculos, sólo los músculos, los que oprimieron.
 

sábado, 25 de noviembre de 2023

QUIERO. Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer.

 
Ilustración autor desconocido.
 
 
Te crees muy macho y no eres más que un ruin mamarracho,
con esas pintas de macarra barato, con ese porte de fantoche acabado, trasnochado.
 
Cómo te atreves a levantar la mano a las mujeres, ser más miserable no se puede,
la cobardía es eso que tú tienes, ¡cobarde!
Quiero que sepan de ti en un infierno,
en uno de fuegos eternos,
que puedan quemar tus palabras, tus gestos, tus voces, quemar los recuerdos.
 
Con ellos se queman los celos, las noches en vela y los miedos, las mil sinrazones que hicieron que fuera mi vida
contigo ese infierno.
 
Te vi saliendo aquella noche de tu casa corriendo, al día siguiente, como siempre, mintiendo; con una venda que
cubría tu mano y jurabas en vano.
 
Tu día a día no es más que dura y triste hipocresía,
la mala fama es tu biografía,
la de un tarado que presume de malo,
que habla con palos.
 
Quiero que sepan de ti en los infiernos,
en uno de fuegos eternos,
que puedan quemar tus palabras, tus gestos, tus voces, quemar los recuerdos.
 
Con ellos se queman los celos, las noches en vela y los miedos, las mil sinrazones que hicieron que fuera mi vida
contigo ese infierno.
 
Solo quisiera que aquella niña olvidara y volviera, que sin dolores amara y creyera, que los amores regresan a
ella y sin rencores.
 
Quiero que sepan de ti en los infiernos,
en uno de fuegos eternos,
que puedan quemar tus palabras, tus gestos, tus voces, quemar los recuerdos.
 
Con ellos se queman los celos, las noches en vela y los miedos, las mil sinrazones que hicieron que fuera mi vida
contigo ese infierno.

viernes, 24 de noviembre de 2023

NOMBRE.

 
-Vicente Aleixandre-
 
Mía eres. Pero otro
es aparentemente tu dueño. Por eso,
cuando digo tu nombre,
algo oculto se agita en mi alma.
Tu nombre suave, apenas pasado delicadamente por mi labio.
Pasa, se detiene, en el borde un instante se queda,
y luego vuela ligero, ¿quién lo creyera?: hecho puro sonido.
Me duele tu nombre como tu misma dolorosa carne en mis labios.
No sé si él emerge de mi pecho. Allí estaba
dormido, celeste, acaso luminoso. Recorría mi sangre
su sabido dominio, pero llegaba un instante
en que pasaba por la secreta yema donde tú residías,
secreto nombre, nunca sabido, por nadie aprendido,
doradamente quieto, cubierto solo, sin ruido, por mi leve sangre.
Ella luego te traía a mis labios. Mi sangre pasaba
con su luz todavía por mi boca. Y yo entonces estaba hablando con alguien
y arribaba el momento en que tu nombre con mi sangre pasaba por mi labio.
Un instante mi labio por virtud de su sangre sabía
a ti, y se ponía dorado, luminoso: brillaba de tu sabor sin que nadie lo viera.
 
Oh, cuán dulce era callar entonces, un momento. Tu nombre,
¿decirlo? ¿Dejarlo que brillara, secreto, revelado a los otros?
Oh, callarlo, más secretamente que nunca, tenerlo en la boca, sentirlo
continuo, dulce, lento, sensible sobre la lengua, y luego, cerrando los ojos,
dejarlo pasar al pecho
de nuevo, en su paz querida, en la visita callada
que se alberga, se aposenta y delicadamente se efunde.
 
Hoy tu nombre está aquí. No decirlo, no decirlo jamás, como un beso
que nadie daría, como nadie daría los labios a otro amor sino al suyo.
 

domingo, 19 de noviembre de 2023

SONETO CLXVI. MIENTRAS POR COMPETIR CON TU CABELLO.

 
-Luis de Góngora-
 
Mientras por competir con tu cabello
oro bruñido al sol relumbra en vano,
mientras con menosprecio en medio el llano
mira tu blanca frente al lilio bello;
 
mientras a cada labio, por cogello,
siguen más ojos que al clavel temprano,
y mientras triunfa con desdén lozano
del luciente cristal tu gentil cuello,
 
goza cuello, cabello, labio y frente,
antes que lo que fue en tu edad dorada
oro, lilio, clavel, cristal luciente,
 
no sólo en plata o vïola troncada
se vuelva, más tú y ello juntamente
en tierra, en humo, en polvo, en sombra, en nada.
 

sábado, 18 de noviembre de 2023

SIGLO 22

 

El muchacho desnudo
-que se parece a ti-
mira por la ventana de su piso vacío.
Nada nuevo: su pene golpeando en el cristal
de forma repetida,
por los siglos de los siglos.

En ese mismo instante, en otro apartamento,
la muchacha desnuda
-que se parece a mí-
apunta con su dedo hacia el cuerpo desnudo
del muchacho.
Su deseo es ingenuo y anafórico.

No podríamos lamernos ni tocarnos
sin romper los cristales, sin nombrar emociones
con palabras gastadas, de otro tiempo.
¿Cómo reconocer poemas de amor
cuando el campo semántico
es antiguo?

Todo lo que algún día nos hizo sonreír
ahora está muerto.
 

viernes, 17 de noviembre de 2023

EN EL HUECO DE UNA MANO, LO INFINITO.

 

En el hueco de la mano, alumbramiento de hojas. 
En la mano,
un hueco de pétalos como muchedumbre que no ha llegado
a ningún sitio, porque llegar es nacer y sólo se nace
en la mano, sólo en el hueco de la mano que nos sostiene.
¿Hueles los nardos? ¿Acaso el olor de los nardos no es un tacto,
acaso no acaricio la palabra como arcilla en la piedra,
acaso no me hundo en la palabra como un hueco que se esconde
y se prodiga, como un cuerpo abierto de amor en el silencio?
En el hueco de la mano, nada quema ni la vida pasa
ni el amor huye, porque en lo profundo de la vida se detiene
y se detienen las manos que han tocado otra mano en la arcilla.
En manos he vivido mi vida, en huecos he bebido el agua
que me daban y he comido el poso de nardos sin horizonte,
el paso de las rosas, el paso detenido del infierno,
la memoria del mundo, el amor que sólo cabe en una mano:
verdadero amor el que cabe en la mano, verdadera vida.
Sonido y silencio, agua y flor, luz y sombra, los ojos de Dios,
los ojos del hombre -lo único sin horizonte-, soledad
-morada del hombre, alma-, todo cabe en el hueco de una mano.
En el hueco de mi mano me encuentro, me tiendo y me prodigo
para cuando no importe ni el sonido no el silencio ni el hueco
amoroso de otra mano, ni el cielo más bello entre los pétalos.
Manos mías, dadme la paz de un tiempo serenado en sus manos.
 
 

miércoles, 15 de noviembre de 2023

LA MALA COSTUMBRE. Alana S. Portero.

“La mala costumbre”, la novela debut de Alana S. Portero debuta en la ficción con esta novela deslumbrante.
 
“La mala costumbre” empieza con una muerte de un joven yonqui y acaba con otra, pero entremedio está atravesado de vida.
Un relato iniciático en el que se cruzan la identidad y la clase. Narrada desde una singular y desgarradora voz en primera persona, la autora recorre la adolescencia de una niña trans atrapada en un cuerpo que no sabe habitar, que intenta comprenderse a sí misma y al mundo en el que vive.
Con crudeza, amor y cariño, esta historia construida a modo de viaje iniciático recorre el difícil periodo de la adolescencia, la incomunicación crónica, el miedo y la vergüenza de quien no encuentra la forma de reconocerse en sí misma. Ambientada en el Madrid obrero y periférico de los ochenta y los noventa, estas páginas pasa revista a aquellos años en los que la heroína y el Sida era una peligrosa mezcla pandémica que solo parecía atacar a los excluidos. A través de numerosos referencias bíblicas, mitológicas y pop, la prosa hábil y sugerente de la escritora madrileña realiza un inspirador viaje vital hacia ese puerto de llegada que es el abrazo con lo femenino, que cuenta las vidas de las mujeres transexuales que trabajan en la calle, su historia, su tradición, su genealogía travesti, su violencia en los hogares y en la calle.
Es un mundo femenino maravilloso con una gran concentración de sabiduría de la que la protagonista necesita formar parte. Lo hacen como pueden con la sonoridad entre mujeres machacadas por el peso del  patriarcado.
En realidad, lo que pasa en la novela es muy aplicable a muchísimas vidas.
 
“La mala costumbre” es una epopeya contemporánea. En concreto, la escritora define su novela como “una historia fronteriza, obrera, identitaria y mágica sobre cómo llegamos a ser quienes somos y cómo se habita una vida entre dos mundos”. Poseedora de un universo creativo habitado por la historia clásica y el activismo. Portero, en esta novela trata sobre una vida trans, desde la infancia hasta la adultez, no es injusto, pero sí se le queda pequeño. Y no porque andemos sobrados de estas narrativa ni porque sea un tema menor, sino porque este libro es la vida sucediendo. No es tanto un diálogo como la vida contándose por sí sola.
Una historia agarrada a la vida, conmovedora, poética y llena de simbolismo sobre una joven que busca su identidad atrapada en un cuerpo que no sabe habitar. Alana escribe mordaz, con crudeza y con la realidad necesaria,  pero también poética y conmovedora, en la que los extremos se tocan para mostraros por qué el resentimiento y la rabia son válidos para sobrevivir en una sociedad que no acepta a los que son diferentes.
Sobre todo y ante todo es una historia de amor sobre los lazos que se establecen y que demuestran que no son nadie sin sus alianzas.
 
Alana ha utilizado muchas mimbres de su vida para construir esta parte del relato del mundo femenino, donde al personaje le pesa una realidad a la que no puede acceder y tiene que observarla desde fuera. Esa genealogía de mujeres, esa construcción de la feminidad a través de los gestos simbólicos y conocidos, es lo que la protagonista entiende que solo se dan entre mujeres. Un bosque con criaturas mágicas con las que la protagonista, a la que la autora no bautiza con ningún nombre porque llevará el nombre de todas ellas, se cruza en su periplo vital.
La autora homenajea a las mujeres transexuales que han trabajado en la calle toda la vida. Mujeres que le precedieron se llevaron la peor parte de la ley de peligrosidad social. Mujeres que han estado en cárceles masculinas, violadas por guardas y los presos comunes, y esta es una de esas novelas que te sumerge en un mundo tan cerca y tan lejos que lo reconoces y lo desconoces a la vez. Duele. Quieres abrazar a los personajes y decirles que todo irá bien…
Algunos hemos conocido a personajes como Margarita, María la Peluca y Eugenia la Moraíta, tres de las mujeres que guían a la protagonista de “La mala costumbre” hacia la luz. Habitan en los barrios, pero a menudo se les daba la espalda. Se las mira por encima del hombro y se las usaba como ejemplo de la mujer en la que no se debían convertir.
Retrata esa masculinidad obrera que pelea por sus derechos, ese comportamiento sin afear al otro hombre.
La novela es también un canto de amor a Madrid. Portero resalta también los puntos fronterizos de los diferentes madriles.
 
Este libro es la primera estancia del hogar que Portero nos ofrece, un aquelarre luminoso alrededor de una mesa camilla. Y yo os animo a poneros vuestras mejores galas y participar de él.
 

domingo, 12 de noviembre de 2023

JURAMENTO A LA VIDA.


-E. M. Cioran-
 
Juramento a la vida.
Nunca te traicionaré del todo;
aunque te he traicionado
y te traicionaré a cada paso;
Cuando te he odiado
no te he podido olvidar.
Te he maldecido para soportarte;
Te he rechazado para que cambies;
Te he llamado y no has venido;
He llorado y no has aliviado mis lágrimas.
Desierto has sido para mis súplicas,
tumba para mi voz.
Silencio para mis tormentos
y páramo para mis soledades.
He matado
en el pensamiento
el primer instante de vida.
He querido
veneno para tus raíces.
Te juro que nunca conocerás
mi gran traición.
Juro por todo lo más sagrado
que pueda haber;
por tu sonrisa,
que nunca me separaré de ti.
 

sábado, 11 de noviembre de 2023

POEMA DE LA FERIA.

 

 
 
Bajo el sol de la tuba
Pasa la feria
Suspirando a los viejos
Pegasos cautivos
 
La feria
es una rueda.
Una rueda de luces
Sobre la noche.
 
Los círculos concéntricos
del "tío vivo" llegan,
ondulando la atmósfera
hasta la luna.
y hay un niño que pierden
todos los poetas
Y una caja de música                
Sobre la brisa.