jueves, 31 de diciembre de 2020

LAS DOCE EN EL RELOJ.




 

Dije: Todo ya pleno.
Un álamo vibró.
Las hojas plateadas
Sonaron con amor.
Los verdes eran grises,
El amor era sol.
Entonces, mediodía,
Un pájaro sumió
Su cantar en el viento
Con tal adoración
Que se sintió cantada
Bajo el viento la flor
Crecida entre las mieses,
Más altas. Era yo,
Centro en aquel instante
De tanto alrededor,
Quien lo veía todo
Completo para un dios.
Dije: Todo, completo.
¡Las doce en el reloj!

lunes, 28 de diciembre de 2020

LA VIDA DESNUDA. Mónica Carrillo.

 Con “La vida desnuda” de Mónica Carrillo se ha alzado con el XXVII Premio Azorín de Novela 2020.
 Tras leer "Olvidé decirte quiero" os traigo la reseña de su nueva novela.
 

SINOPSIS:
Porque todos fuimos alguna vez el secreto de alguien
Una llamada de teléfono lo cambió todo. Cuando Gala emprende el viaje para despedirse de su abuela Rosario no puede imaginar que pronto descubrirá que nada es lo que parece en su familia: a pesar de las apariencias, o precisamente por ellas, todos tienen una vida pública que muestran al mundo, una vida privada reservada para unos pocos y una vida secreta que permanece oculta para todos. Poco a poco, Gala irá destapando las distintas capas que envuelven a sus padres, a su hermano Mauro y a su tía Julia. Y en la cima de tantos descubrimientos hallará aquello que siempre buscó y que se le resistía: el amor sin condiciones.
La vida desnuda, Premio Azorín de Novela 2020, es el viaje de Gala a los secretos de su familia. Un recorrido emotivo y sorprendente en el que ella misma terminará siendo una persona distinta a la que comenzó.
 

 

Me atrevería a decir que es la novela más íntima que ha escrito Mónica.

Lo cierto es que, sí que hay transmisión de emociones, a lo largo de la novela que se distinguen por encima de las demás como son el miedo, las inseguridades y los mapas mentales con que a veces tenemos que convivir, y seguir creciendo. Los temas que aborda la autora en la novela son el peso de la familia y sus secretos, el amor verdadero, el adiós a la infancia, la búsqueda esperanzadora de la felicidad. Y todo ello lleva a los prejuicios. Nada ocurre por casualidad.
“La vida desnuda” es un drama en varios actos, un repaso a una familia que tras su apariencia de éxito oculta los secretos de cada uno de sus miembros, esas vidas secretas, como Carrillo las define, que no están al alcance de nadie pero que perturban el clima familiar cuando no se convierten en armas que hieren a quienes supuestamente queremos.
Con esto quiero decir, que no es un libro negativo en el sentido amplio de la palabra ni genera desazón, pero sí sobrevuela la historia a través de sentimientos que pueden considerarse como tales y que, en general, tratamos de ocultar de nuestra vida pública. Su intención es reflexionar sobre las emociones, sobre el mundo de los secretos en este caso y en particular este mundo, de los secretos, tiene mucho que ver con el sentimiento de culpa y con el miedo: a defraudar, a no ser aceptado, a decepcionar… Esos son sentimientos negativos pero existen. Creo que es una novela vitalicia, pero es cierto que la vida lleva aparejadas muchas sensaciones y algunas son positivas y otras no tanto.
Hasta aquí todo correcto. Todos esperábamos unos secretos inconfesables en esa pudiente familia. Que solo nosotros, estimados lectores, podamos conocer de mano: o de los protagonistas o de la autora. Una trama en la cual se fuera enredando más y más el pasado de la familia, incluyendo esa constante de Gala en la cual hace referencia explícita a que ella mató a su abuelo Fermín. Y eso es sinceramente lo que esperamos: pero es tanto lo esperado, que finalmente obtenemos una limitada recompensa.
Además, otro asunto que le resta calidad a la novela resulta el hecho de que de la nada y sin mediar palabra, todos y cada uno de los protagonistas: papá, mamá, Mauro, la tía, incluso el australiano del tren, comienzan a contar sus historias sin venir a cuento y como resultado tenemos  unas confesiones forzadas, metidas con calzador en una trama de por sí un tanto apretada.
Nuevamente aun presentando unos ingredientes de interés, acaba navegando entre dos aguas.
 

Mónica Carrillo logra seducir a los lectores con esta emotiva novela, en la que su prosa, envolvente, os trasporta hasta los rincones más íntimos del ser humano. Cualquiera puede sentirse cercano a Gala, su protagonista, una mujer que sigue enamorada de su exnovio  tocada por los acontecimientos familiares que suceden en su vida. Es fácil empatizar con ella.

En nuestro interior, todos. Todos nos conocemos. Otra cosa es que no nos apetezca mirar hacia dentro, porque hay veces que mirarse al espejo desnudo supone un ejercicio de sinceridad absoluta y conlleva situaciones dolorosas. Pero también es la realidad. Mirarse desnudo frente al espejo es lo mejor que puede hacer uno mismo para entenderse, aceptarse, para vivir en equilibrio y armonía.
Con habilidad, la autora se hace valer de la primera persona del singular, tan personal y próxima, para narrar con ritmo la historia de gala y la de los suyos. Una historia que no os será ajena. La escritora ilicitana consigue ir siempre de la mano de los lectores y demuestra su extraordinaria capacidad para haceros pensar sobre el sentido de nuestra vida. “La vida desnuda” conmueve y en ocasiones intriga a partes iguales.
Tenemos que aplaudir la forma en que la autora nos conduce por esas tres vidas, haciendo de ellas tres partes bien diferenciadas en la novela bajo los títulos explícitos de: Vida, Vida privada y Vida secreta. Mantiene nuestra atención, y la tensión de encontrar esa verdad oculta nos mantiene despiertos. Es por ello que cuando vemos venir el tercer y último bloque del libro nos esperamos fuegos artificiales, el summum de la historia. Muy conseguido. Pero no, seguimos igual que antes, escuchando confesiones banales, sentimientos universales, y reflexiones que no conducen a nada. Y que la tía solo cuente su historia cuando lleva unas copas de más encima -en realidad creo que todos los personajes acaban haciendo lo mismo: confesar cuando van un poco achispados- no resulta muy cómodo para el lector.
 
Bajo el personaje de Gala, Carrillo elucubra sobre los sentimientos, la culpa y las decisiones correctas, sobre decidir con el corazón o con la cabeza, pero sobretodo, de ser capaz de vivir nuestra propia vida sin ser juzgados.
La cercanía con el personaje, con sus logros y sus desdichas, crece al igual que la reflexión final, que será inevitable en todo aquel que bucee en sus páginas: ¿Qué vivimos? ¿Cuáles son nuestros secretos? ¿De qué depende nuestra felicidad? Poco a poco, Mónica Carrillo va destapando las distintas capas que arropan a los personajes: los padres de gala, su hermano Mauro, su tía Julia… Tras destaparlas, una a una, la protagonista hallará aquello que siempre buscó y que parecía resistírsele: el amor sin condiciones.
Pero para llegar a este punto, la autora ahondará en la memoria y las trayectorias vitales de los personajes. Una acertada narración, los diálogos son vivos, las descripciones precisas y los lugares por los que transita, común para la mayoría de los lectores, Oficio y sensibilidad no le faltan.
 
Poco más puedo contar. “La vida desnuda” me ha parecido una historia bastante sencilla. Tiene el aliciente de los secretos familiares, pero son asuntos más o menos cotidianos, fáciles de encontrar en cualquier familia. Por eso resulta una historia cercana y accesible, con reflexiones que están a nuestro alcance. Destaco el personaje de Gala y la tía Julia, así como esas escenas en las que me he visto retratado.
Sin que me haya dejado una huella indeleble, “La visa desnuda” me ha resultado una lectura agradable, sin grandes alharacas, que se lee en un suspiro.

viernes, 25 de diciembre de 2020

UNA HISTORIA PEQUEÑA. FELIZ NAVIDAD.

-Moisés Pérez Martínez-
 
Es la historia pequeñita
de una virgen Nazarena
que era pobre y muy bonita
que era humilde y era buena.
 
No, no hay milagros,
hay un cariño,
Dios es un niño
mecido entre pajas
y ella es humilde
sin sedas ni alhajas,

mo mi madre,
que reza y trabaja,
como mi madre 
que reza y trabaja.
 

jueves, 24 de diciembre de 2020

NOCHEBUENA. FELIZ NOCHE.

  

La llama de la lunmbre cetellea
en el modesto hogar de la alqueria
Es Nochebuena, noche de alegría
en la ciudad lo mismo que en la Aldea.

Noche santa en que el alma saborea
de la guitarra mora la armonía,
noche de luz que eclipsa la del día
noche de sol que en el hogar flamea.

En la Noche cristiana, el natalicio
de aquél mártir Jesús que en el Calvario,
para salvarnos se abrazó al suplicio.
 
¡Pero, ay, del pobre y triste solitario
que en esta noche alegra y de bullicio,
se halle sin pan, sin lumbre y sin salario!
 

domingo, 20 de diciembre de 2020

sábado, 19 de diciembre de 2020

CANCIÓN DE AMOR PARA ALEX.


 

Mi hombre de llave inglesa es mi dulce patootie;
el amante de mi vida, de mi juventud y de mi vejez.
Mi corazón le pertenece a él y solo a él;
los hijos de mi carne son suyos y llevan su rabia
Ahora crecido a años avanzando a través de las docenas
el beso meloso, los labios de vino y fuego
se desvanecen dichosamente en los años distantes de allá
pero todos mis días de felicidad y asombro
están acunados en sus brazos y ojos enteros.
Nos llevan bajo las aguas del mundo
más allá de los postes estelares de un planeta distante
Y arrastrándose a través de las algas del océano
nos enredan con cuerdas e hilo de recuerdos
donde hemos estado juntos, tu y yo