Ilustración Joseph Lorusso.
Ella
esperaba el fin de semana para bailar,
él
esperaba los lunes para escaparse del ruido.
Así
los días se sucedían y se vestían de rutina
en
un circuito de bares carcomidos, cafés y sofá.
Así
el tiempo los absorbió como un libro viejo,
pero
nunca disfrutaron de los excesos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario