Dulce
fuera el vocablo en vuestra boca,
mas
no lo pronunciáis. Si os quema el labio,
¿qué
no haría la acción? Sed generosa,
venced
vuestro temor… sin daros cuenta.
Ha
poco os deslizasteis sin zozobra
de
la risa al suspiro y del suspiro
al
llanto… Deslizaos más ahora
y
llegaréis al beso sin notarlo,
pues
la distancia entre ambos es tan poca
que
un solo escalofrío los separa.
Al
fin y al cabo, ¿qué es, señora,
un
beso? Un juramento hecho de cerca;
un
subrayado de color rosa
que
al verbo amar añaden; un secreto
que
confunde el oído con la boca;
una
declaración que se confirma;
una
oferta que el labio corrobora;
un
instante que tiene algo de eterno
y
pasa como abeja rumorosa;
una
comunión sellada encima
del
cáliz de una flor; sublime forma
de
saborear el alma a flor de labio
y
aspirar del amor todo el aroma.
Poema
perteneciente a la obra de teatro "Cyrano de Bergerac".
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