martes, 5 de marzo de 2024

TRES. Dror Mishani.

El autor israelí es atípico y perturbador, como lo manifiesta en “Tres” con una trama distinta. ¿Thriller psicológico? Si, y también novela policiaca.
Un claro tono costumbrista al descubrir magistralmente la vida cotidiana de tres mujeres de Tel Aviv con realidades muy globales.
 
SINOPSIS: Escrito por uno de los maestros de la novela negra actual, Tres es un sorprendente thriller sobre tres mujeres cuyas vidas aparentemente normales se entrecruzan en un engañoso rompecabezas emocional. Orna, maestra en Tel Aviv y madre divorciada, se ha decidido a olvidar su fracasado matrimonio y empezar una vida nueva; Emilia, una cuidadora recién llegada a Israel desde Letonia, necesita a partes iguales un trabajo y un amparo espiritual que la mantengan a flote; Ella, por su parte, acude cada mañana a un café para terminar su tesis doctoral, pero, sobre todo, para huir de su monótona vida familiar. El destino de estas tres mujeres dará un giro trágico el día que aparezca en sus vidas Guil, un hombre que pronto dejará claro que no es quien dice ser. Aunque quizá ellas tampoco.
 
 
 
 
 
Si usted es de los que gustan de salir de vez en cuando de las coordinadas habituales de lectura, he  de decir que se atreva con la literatura de “Tres”. Para mí un grato descubrimiento. Dror Mishani sitúa la acción en Tel Aviv.
Un thriller disfrazado de otra cosa, un thriller literario que presenta un triángulo femenino. Una novela en tres partes y con tres mujeres protagonistas que se relacionan con el mismo hombre.
La primera de las tres partes se siente como una historia de flirteo, galanteo, aventura y superación. La segunda es una historia de pánico, atrocidad y cobardía. Y la tercera fue una esperada y anhelada investigación policial. Cada una pronto descubrirá que no es quien parece ser. El hombre tiene una forma muy concreta de relacionarse con ellas. Ellas terminan sabiéndolo. Las consecuencias varían, pero lo que no cambia es su modus operandi, es decir, una característica que a él lo define y que el lector lo ira intuyendo a medida que se adentra en la trama.
Y como he señalado en la introducción alterna la magnífica descripción de vidas cotidianas distintas, reales y completas. Se combinan con personajes de perfiles psicológicos profundos y el retrato realista de una sociedad ajena para nosotros como es Tel Aviv.
Porque la novela de Mishani se puede definir como una simple y llana historia de asesino serial pero encierra mucho más si se quiere acceder a otras niveles de lecturas: desde la banalidad del mal encarda en Guil, este tipo gris y anodino pero calculador, hasta el modo en que la vida actual ha cambiado las formas de relacionarse más allá de los esquemas matrimoniales y familiares, ya sea por el influjo de las nuevas tecnologías o por los ritmos y relaciones que se dan en el seno de nuestras sociedades.
Intriga inteligente que te engancha y no te suelta, aunque el arranque sea un poco desconcertante. Si te habías quedado estancado con el bon noir nórdico, da un paso adelante y prueba con este thriller israelí. Te sorprenderá.
 
“Tres” es una novela muy cuidada en la historia y en la escritura, se saborea al máximo su ritmo pausado y con un desasosiego creciendo página a página por la genialidad psicológica mostrada en cada uno de los  personajes. Ha logrado que como lector os impliquéis. Dror Mishani va arrastrar al lector poquito a poco, sin que se dé cuenta, a un desenlace con el giro magistral que sufre la historia. El autor no engaña  solo juega psicológicamente con el lector, el hecho siempre estuvo ahí, simplemente el autor es muy hábil a la hora de narrar la historia.
No es una historia previsible porque la novela adquiere en su tercio final un giro original que brinda una nueva perspectiva. Lo que comienza como la crónica novelística de una relación tóxica camino del degolladero contiene pistas y circunstancias que encajaran en una construcción narrativa sorprendente.
Esta novela va por otros derroteros, aunque se inscribe plenamente en el thriller psicológico, donde es tan importante lo que sucede como lo que los personajes son o parecen ser, Tampoco sería la gran novela que es sino fuera por el virtuosismo técnico de su autor, dominio de diálogos, con una maestría absoluta del estilo indirecto, su habilidad para cambiar de punto de vista cuando la historia lo requiere y, en definitiva, para crear una tensión narrativa soterrada y ascendente sobre un escenario de lo más cotidiano.
Llama la atención el perfecto uso del tiempo cronológico, que forma un entrelazado en la que los acontecimientos encajan como un puzle. Ese tiempo es, en realidad, la verdadera argamasa de la historia porque lo ajusta en su mecanismo de relojería extraño y lleno de calles sin salida. El narrador cuida la estructura del tiempo para lograr el efecto que desea: haceros entran en la historia sin vacilar hasta que os veáis atrapados en ella. Y, de igual modo que él tiene rasgos muy definidos que lo hacen reconocible, ellas presentan un pasaporte emocional en el que podréis encontrar algunos aspectos comunes, definitivos, que explican el porqué de algunas cosas de las que suceden.
 
“Tres” es una novela tremendamente viva desde el principio es, entre otras cosas, porque sus personajes están llenos de matices, poseen la complicidad de la vida. Están muy bien trazados los personajes centrales de esta novela, sobre todo las mujeres que van evolucionando y que viven situaciones muy actuales: divorcios, búsqueda religiosa, cuidado de ancianos, relaciones tóxicas, patrias, soledad…
Orna, Emilia y Ella, mujeres que se preocupan y se espantan ante temas como: desempleo, enfermedades, pobreza, violencia. Incluyen el extracto social que representan; Orna, sufre el distanciamiento de su exmarido y el trauma que esto le puede causar a su hijo y se debate entre el deseo de reactivarse emocional y sexualmente. Emilia, introduce un elemento sobrenatural, su capacidad para ver el fantasma del anciano que cuidaba. Ella, le otorga un protagonismo encubierto que será el detonante de una perfecta resolución.
El personaje masculino es un poco más brumoso, pausadamente definido, lo que le viene muy bien a la historia, aunque iréis descubriendo aspectos de su carácter peculiar que vienen perfiladas por exigencias del guión. Entraña el desenlace un final en el que todas las piezas encajan.
 
Engancha desde la primera página, absorbente, se lee sin respirar, no tiene desperdicio. ¡No dejen de leerla…!

No hay comentarios:

Publicar un comentario