Ilustración autor desconocido.
Os
llevo alrededor de la muñeca,
en
la pulsera que he comprado
al
salir del Museo.
Por
diez monedas vais aquí enhebradas,
Perséfone
morena de ojos de miel,
y
tú, Palmira de delgados dedos,
adolescente
Erminia de rosadas
mejillas
y carnosos labios,
rubia
Cloé que miras con asombrados
ojos
abiertos preguntándote
si
más allá del vencido Leteo
vas
a hallar el amor.
Todas
sois jóvenes
y
los nombres que os doy los imagino
pero
vuestros retratos son tan fieles
noticias
de vosotras mismas
que
a cada una
he
atado a un abalorio plateado,
translúcido,
dorado, blanco o gris,
y
he dejado sin nombre
sólo
a la joven de ojos claros
que
apoya un lápiz en los labios
con
gesto pensativo
y
hay quien llama Safo.
Ella
muestra el Deseo
de
capturar lo imaginado apenas
en
los vastos ensueños de la infancia
cuando
las madres nos decían
con
susurrante admiración los nombres
de
los pintores y los músicos,
de
los poetas y los sabios
que
sobreviven a sus días
y
que acompañan a los nuestros.
No
tenéis nombre pero yo os lo pongo,
coro
hermoso, y os llevo sobre el pulso mío
que
late todavía y resucita
el
dolor y el placer que fueron vuestros.
No hay comentarios:
Publicar un comentario